sin querer queriendo llegamos desde San Miguel Escobar por un camino que no conocíamos a San Pedro las Huertas, que también es un remanso de paz, con exquisito templo lleno de tesoros artísticos, sus cuatro capillas posas, el tanque de las lavanderas con agua suficiente, con su campanario cubierto de y seria de gran belleza y finura, las casas consistoriales. Y lo más importante que es de Guatemala y es de todos.